GUIA RUNNER
Un estudio arroja que para el 2060 los récords mundiales
alcanzarían un límite.
El ser humano ha puesto en evidencia que puede correr más
rápido de lo que se cree.
El ser humano está en una constante evolución y con el pasar
de los años este continúa buscando la forma de rendir al máximo de sus
condiciones. Al trasladar esta idea al mundo del running, vemos que en diversas
competencias los atletas buscan llevar sus límites fisiológicos a grandes
extremos. Rompen récords y ponen en evidencia que el ser humano puede correr
mucho más rápido de lo que se cree.
En el 2008 el Instituto de Investigación Biomédica y
Epidemiológica del Deporte en Francia concluyó que para el 2060, los récords
mundiales alcanzarían un límite. En el estudio, además, analizaron más de 3 000
marcas en los últimos 100 años. Llegando a la conclusión que en 1896, los
atletas funcionaban al 75% de sus capacidades y que hasta el año de la
investigación se alcanzó el 99%. Así el estudio menciona que para alcanzar a
medir nuevas marcas se tendrá que medir con milésimas de segundos en pruebas de
pista y centésimas de segundo en maratones.
UN ENTRENAMIENTO ADECUADO
Para llegar al máximo de nuestras condiciones es necesario
tomar en cuenta la importancia de un correcto entrenamiento. Este va desde
tener un buen descanso físico y un sueño adecuado (8 horas en promedio) hasta
seguir un buen régimen alimenticio. Según Oliver Landeo Head Coach de Endurance
Team, la alimentación representa el 50% del éxito deportivo. Se recomienda
incluir en la dieta carbohidratos, vitaminas, proteínas y algunos vegetales.
Para aquellos atletas que entrenan de forma constante y se
desee evitar lesiones o sobrecargas musculares se sugiere llevar fisioterapias.
“Un buen trabajo de prevención es la mejor manera de llevar entrenamientos más
intensos y variados”, explica Landeo. El ideal es visitar el fisioterapeuta al
menos 1 vez por semana.
EL CLIMA
Este es un factor sorpresa que influye positiva o
negativamente en el rendimiento del atleta. “la altura, la humedad, el calor,
frío, lluvia, etc. Pueden perjudicar el estado físico del atleta e impedir su
máximo potencial físico”. Una forma de evitar malas pasadas en un entrenamiento
es llevar la vestimenta correcta como: un buen par de zapatillas que
correspondan a tu tipo de pisada y ropa adecuada y confortable.
Fuente: Deporte Total El Comercio